Con el mensaje “Esta pesadilla puede terminar”, que podría ser el título de uno de sus libros y se refiere al candidato republicano Donald Trump, Stephen King, autor de novelas como “Carrie”. “It” o “El resplandor”, pide el voto para la vicepresidenta estadounidense y candidata demócrata Kamala Harris.
“Dado que me gano la vida escribiendo novelas de terror, siento que tengo cierta autoridad cuando digo que cuatro años más de Donald Trump en la Casa Blanca serían una absoluta pesadilla”, afirma King en un mensaje enviado por el equipo de campaña de Harris a los votantes para pedir donaciones individuales de 25 dólares.
El objetivo, dice King, es “asegurarnos de que elegimos a la vicepresidenta Kamala Harris como nuestra próxima presidenta” en las votaciones del 5 de noviembre.
King, que es un crítico declarado de Trump, al que llegó a llamar “nuestro presidente idiota” en 2017, lo que le costó ser bloqueado en Twitter por el exgobernante, afirma ahora: “en toda la historia de Estados Unidos, nunca ha habido un hombre menos apto para la presidencia”.
El escritor súperventas subraya que “la vicepresidenta Harris está trabajando arduamente y cumpliendo con el pueblo estadounidense cada día”, pero esta elección “no será fácil”, y recuerda a los electores que el resultado se hace juntos y participando activamente para alejar “todos los peligros de Donald Trump (y hay muchos)”.
“Estoy haciendo mi parte, ahora es el momento de que tú hagas la tuya. Esta pesadilla puede terminar”, señala.
Harris y Trump están técnicamente empatados en intención de voto a falta de una veintena de días para las elecciones. El equipo de la vicepresidenta ha puesto en campaña al presidente Joe Biden y los expresidentes Barak Obama y Bill Clinton, además de a famosos como Stephen King, para tratar de impulsar a la vicepresidenta.
Escritor estadounidense de novelas de terror, ficción sobrenatural, misterio, ciencia ficción y literatura fantástica, King, de 77 años, ha vendido más de 500 millones de ejemplares de sus libros, muchos de los cuales han sido llevados al cine.
EFE